Las realidades que asoman
Por los los ojos de mi alma,
Despertando de las tormentas
En tierras adentro
Cómo en un mal sueño,
Desafiando las sombras
Del otoño de mi vida.
Y el corazón que guarda
Este silencio que grita
En esa orilla cercada por dunas
De rubias y delicadas arenas,
Que el rocío de la mañana
La humedece a despuntar
El nuevo y claro día.
Como salado liquen
Que nace entre las piedras,
Furtivas las nubes
Huyen en el horizonte
Asomándose entre las brumas
La calidez de tu figura,
Cómo en un espejismo,
Como cuando te encontré
Delicada y deseada,
En ese dulce momento
Para perdernos en la noche
Perpetua y oscura.
Alumbra luna ese instante,
Bajo las estrellas delicadamente
Se refleja en tus negros ojos,
¡Que dicen los sabios
Es una mirada de color de rosa!
Ahora sé, ahora,
Que cuando te siento
Ningún sentido mío se limita,
Vivo en mi locura
Involuntaria contra el destino,
Cierro los ojos y te pienso
Una tempestad de deseos
Se forma en mi pecho
Mientras me hablas.
Un suspiro sale de mis adentros
Expresado en mis labios
Como una súplica que se dilata
Y atraviesa el vacío
Que nos limita y separa,
Haciendo florecer la madrugada,
Y si yo muero hoy
Quizás en lo alto
De ese inmenso firmamento,
Nazca una nueva estrella
Para que sea tu luz al alba.
SILVER©
No hay comentarios:
Publicar un comentario