miércoles, 30 de diciembre de 2020

Quiero verte

 

Tener esa sensación,

En pensar que voy a verte,

No sé cuándo, no sé como,

Ahora o mañana

Solo sé que voy a verte,

Pero mi corazón, ahora,

Quiere tocar el cielo,

Hilando...hilando...

Una aguja enhebrando,

Con ese hilo de color rojo,

Con el que se cosen heridas

Aún con manos temblorosas.

Sueño que voy a verte

Y la sombra de la noche,

No se desprende de mi luna,

Y ella si se desprende 

De su halo, y ante mi

Se queda dormida,

Como amante, en las horas

Más altas de mi locura

Locura por verte,

No sé en qué instante,

Ese es mi pecado,

Mi eterna condena,

Alma encadenada 

Tras tus pasos,

Tus besos son mi galera.

No pido clemencia

A mí condena al destierro,

Instauró, insurrecto,

Al momento de verte,

Cómo ley nueva del universo.

Más allá del silencio,

Y en cada palabra resucita

El eterno sentimiento

Pensando que voy a verte.

No sé si ahora,

No sé en qué momento

Si ahora o mañana,

Aunque después

Me lleve la muerte,

Solo sé, solo sé...

Que quiero verte.


SILVER ©


martes, 29 de diciembre de 2020

Quisiera hablarte

 

Quisiera hablarte a solas,

En esa soledad donde nadie,

Donde nadie más cabe,

Mostrandonos en cada momento

Todos nuestros adentros,

Qué ese silencio sea palabras

Frases no escritas

Qué te dirán lo que siento,

Silencios que se graban

Aunque no venga a derecho,

Porque hablarte, te mentiría

Si no fuese cierto,

Qué es lo que más quiero,

En cualquier lugar, 

En cualquier hora,

Quisiera hablarte a solas.

Tan solo unos momentos

Que duren una eternidad,

Que de a mis sentidos

La paz que ansío,

En ese claro oscuro

Con mis ojos cerrados

Roto por los sonidos

Y de una mirada desafiante.

Hablarte a solas

A tu alma desnuda

Qué aún sabiendo lo que siento,

Con la palabra muda

Te hablará mi mirada

Las manos entrelazadas

Olvidando las vidas pasadas,

Quiero hablarte,

Descubriendo el aire

En un tapiz de hojas

Que baila entre los arboles,

Rodeados de un sutil aroma,

Del canto de las aves,

Sainete que la vida compone,

Volver a descubrirte,

En cada palabra,

En cada gesto,

Te descubro con mis silencios

Sellado con una sonrisa

Con mi palabra escrita

Y en mis pensamientos

Te hablo a solas.

Quisiera hablarte, 

Puede que no sea ahora,

Quizás sea mañana

O esta misma tarde,

No importa el cuando

Ni tan siquiera el donde,

Solo sé que quiero hablarte,

Si no es besando tu boca

Que sean mis manos

Que en silencio te hablen.


SILVER ©


lunes, 28 de diciembre de 2020

No quiero

 

No deseo en mi vida 

La razón al sentimiento

Las nubes, al azul cielo,

Quiero un mar embravecido

Y no los tediosos días,

Anteponer el cardo al nardo,

Lo amargo, al dulce chocolate,

Al amor que en un pecho late.

Sin querer, queriendo,

Pinto tus deseos 

De azul en las esquinas,

Boceto en negro

Convirtiéndolo en arcoiris

Y en rosas las espinas.

No te falta el color

Porque tú paleta está llena,

Pintas sonrisas en los labios

En oasis en las almas,

A vivir sin esos miedos

Que en la oscuridad acechan.

No deseo en mi vida 

Los no quiero al quiero,

A quedarme sin mi musa

Y huérfanas mis poesias,

Anteponer todo 

A vivir sin un sueño

A bailar bajo la lluvia

O contemplar el firmamento.

No deseo en mi vida

La apatía a la alegría,

A miles de risas,

El regalo ofrecido

Que permanece en silencio

Mientras yo te espero,

Y no hay peor sufrimiento

Que dejar vacío un abrazo

Que sabe de tu amor

Y del mío en tus adentros

Bautizado en tardes de otoño

Que huérfano quedó

Cómo un triste retoño.

Derramando en el camino

Mis letras surgieron

Bajo el candor de tu mirada,

La ausencia se hizo presencia

Cómo en el cielo oscuro

Millones de estrellas,

Diminutas luces

Reflejándose en tus ojos

En aquellas tardes,

Tardes tan amadas,

Solo deseo que en mi vida

Sigan habiendo sueños.


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domingo, 27 de diciembre de 2020

Cuando abras los ojos

 

Cuando abras los ojos

Yo allí estaré

Aguardando tu presencia

A la luz del alba,

Abriendo los párpados

En la noche que se marcha,

Luz que me embriaga

Al despertar a la vida.

Aparición inalcanzable

Apartando las brumas del sueño

Henchido de momentos,

Sílabas escritas en mis temores,

Sensación de esta última noche.

Felicidad sin ocaso

Incitada a vivirla

Que en el olvido no cae

Sobre la página que escribo

Mezclándose con la tinta,

Abre los ojos, tu pecho al amor

Que tu corazón reclama,

Fiel a la memoria

De estas horas tiernas,

Donde el júbilo se adueñó

De nuestras inmortales almas.

Abre la puerta,

Que mi corazón está

Pegado a la reja

Temblando de frío,

Esperando a que abras

Cubierto del helado rocío,

Aquí espero, 

Que llegue el momento,

Repitiendo tu nombre,

Sin dar límites al tiempo.


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sábado, 26 de diciembre de 2020

Habanera

 

Salgo a mi ventana

Cuando las nubes toman

Un tono rosado,

Después de este día

De este recién empezado

Frío y húmedo invierno,

Cantando al atardecer

Una vieja habanera

Resuena en el cristal

Dibujando lágrimas

En la tarde que se escapa,

A solas contemplo extasiado

Ese sutil color,

Cómo algodón de azúcar

De fresa, como tu boca,

El candor de tu mirada,

Conservándolo en mi retina

Mirando detrás de la cortina,

Dulce ilusión que emana

Desojando una eterna Margarita.

Brillante luz cegadora

Es el sol de poniente,

Se oculta tras tu figura

Recortando la luz

Engrandeciendo tu aura

El sol dorado a tu espalda.

Rebelde, desciende a su morada,

La luna creciente,

Asoma tímida,

Y con el astro rey

En el cielo se cruza,

Se despeja las brumas

Efímeras nubes

Escondidas en la noche,

Que tiemblan cuando resuena

Tus pasos tras mi puerta.

Las estrellas tiritan

Guiñando esquivas

El fulgor de la luna,

Quién, en el abismo se aleja,

Disipando las nubes

Que se volvieron blancas,

Fundiéndose en la oscuridad

Ocultos en el horizonte,

Esperando a que de nuevo

Tu sonrisa despierte las aves

Y les cante a la alborada.


SILVER ©


viernes, 25 de diciembre de 2020

El azul del cielo

 

Bajo el azul oscuro

Sembrado de estrellas

Una canción estalla

Saliendo de una garganta,

En un éxtasis

Transformado en plegaria

Y se diluye en la noche

Cómo un suspiro

Y que los sueños provoca,

Se queda en un callado

Y solitario te quiero.

Extinguido ese lamento

Invitando a la fé,

Ausente en el tiempo,

Ambrosía, dulce líquido

Que a sorbos apuro

En la noche de terciopelo;

A compás de esa música

De tu cantarina risa 

Siempre acompañada,

Balada que aleja

Los malos presentimientos,

Compartiendo las estrellas

En oscuridad plácida

Horas en que los suspiros

Invitan a crear poemas.

Y a media voz,

En un murmullo,

Depositándolos al oido,

Oído inquieto

Y provoca el jubilo

Liberando en silencio

Los más ocultos secretos,

Dando calor

A las temblorosas manos

Ávidas de caricias,

Escapándose las rosas

Resonando en la memoría

Que las manos guardan

Cómo destellos

En las estrofas de la canción

Que saliendo de la garganta,

Se diluye en la noche

En las altas horas,

Del sueño...


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jueves, 24 de diciembre de 2020

El color

 

¿De qué color es el deseo?

El sonido del agua,

El calor de tu presencia

Cuando me miras

Cómo lluvia bienhechora

Cayendo en campo seco,

Arcoiris después de la tormenta

Interminable de una noche de verano.

¿De qué color es el amor?

Es de piel morena,

Larga melena,

Cayendo sobre sus hombros,

Distinta la palabra

Pero que crea poemas,

El color del amor

Es el que ella pinta

De alegres colores 

Brillantes miradas

Cómo cristal vulnerable,

Diáfano y transparente,

Que moldeado por el fuego,

Frágil en sus adentros,

Vidriera multicolor,

Fuente de luz invisible,

Así es el color de tu amor,

A pesar de su fragilidad,

Duro como el acero.

¿De qué color es el sentimiento?

Blanco y puro,

Arroyo cristalino,

Espíritu travieso,

Que baila en mi corazón abierto,

Manecilla de un reloj,

Que detiene el tiempo,

Que nace y muere en tus besos.


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miércoles, 23 de diciembre de 2020

Mis silencios

 

En noche de luna que crece

Mis silencios se oyen 

Aspirando los aromas

De azahar y canela,

Suspirando sin cesar

Silencios llenos de palabras,

De emociones, que todo lo llena.

Absorto en mis callados silencios,

Escondiendo el temblor

Cuando leo las letras 

Que a mi alma llegan,

Figuras incontroladas

Que vibran al través 

De mi solitaria inconciencia.

Silencios rotos,

Por pensamientos olvidados,

Que atrapa el corazón 

En los silencios, en las madrugadas,

Que va envolviendo de ternura

Mis pensamientos que por ti

Lanzo al viento.

Aquí te espero, en mis silencios,

En mis pensamientos aletargados

Por el tiempo, aquí te espero,

Contando las estrellas,

Para contemplarte a través

De cada una de ellas,

En esta noche calma

Aquí estoy, escondido,

En mis silencios, 

Tras esa luna que se escapa

Por detrás del horizonte.

Cuando la música me envuelve,

Escucho mis silencios

En cada nota que suena

En el vibrato de mi garganta

Pronunciado en la oscuridad

De la noche tu nombre

Cuando te sueño.


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martes, 22 de diciembre de 2020

Esos momentos

 

En estos sosegados momentos

En una incipiente noche

De luna transparente

Se cobijan mis pensamientos,

En los últimos días 

Que se van escapando

Aunque el sol luzca

Las nubes grises

Nublan el cielo,

Sombras en mi voz

Soles mortecinos

En el ocaso de la tarde,

Tiempo que de mis manos 

Lentamente se escapa.

Cuando amanezca 

El día me devolverá

De nuevo la memoria,

En silencio...

La memoria de mi vida

Donde brillan tus ojos,

Donde se hacen eternas

Tus luminosas miradas

Dando luz a la mas pura

Y densa oscuridad.

Despierto confuso,

Fluye hacia mí las sombras,

Todas me llaman por mi nombre

Desconociendo mis heridas,

Las golondrinas ya volaron

Al sur hace tiempo

Dejando un desolado

Y vacío invierno.

¿Donde van nuestros deseos,

Donde van las palabras?

Se quedan en nuestros adentros

Cómo estrías marcadas

Por un candente hierro,

¿Donde van mis palabras,

En qué lugar se esconden?

¿Te llegan al corazón,

O como ellas te escapas

Huyendo del frío 

gris y tedioso invierno?

Si vivimos hoy quizás

Habrá otro mañana,

Viviendo esos momentos

Construimos otros

Que se guardan entre

Las paredes del alma,

Allí de dónde salen las palabras

Que se escapan libres

Y como palomas blancas

Cada noche asoman

En tu entreabierta ventana.


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lunes, 21 de diciembre de 2020

Aire

 

El aire ligero

Bajo tus pies, mece las olas

En una sinfonía multicolor

Y las mariposas livianas

Revolotean a tu alrededor,

Coronan tu negra cabellera

Con una canción

Expresada desde mi corazón,

Como un coro de voces,

Fanfarria anunciando

El ocaso del sol en el horizonte

Reflejándose en tu cara,

¡Morena mía!

Sus rayos naranjas,

Mirando serena,

Dejando caer una lágrima

Que se pierde en la arena

Robandola las olas

De una playa lejana.

Me asfixio mirando tu belleza

Salvaje, indómita, guerrera,

Quisiera morir

Y mis palabras no expresan

Lo que mi alma lleva,

No expresan ese sentimiento

Cada vez que tus letras leo,

Escritas por tus dedos

Sin saber de mis temores,

De todos mis miedos.

¿Y que daría yo?

Por volver a verte,

Todos mis suspiros al infinito,

Todas mis poesías al olvido,

Todas mis lágrimas, mis letras,

En el abismo del infierno,

Nadie te ha escrito,

Tan sentidas palabras,

Nadie te ha hablando,

Desde lo más hondo de un pecho.

Y quisiera morir en tus ojos,

Mientras se escapa 

Mi último suspiro

Mirándote moriré

Tocando el cielo.


SILVER©

Te seguiré viendo

 

Y te seguiré viendo

Cómo ciego que ve

Por vez primera la luz,

Los colores de ese primer día

Huyendo de la oscuridad.

Te seguiré mirando

Siempre con ojos nuevos

Contemplandote como la fuente

De ese espejismo que surge

En el tórrido desierto.

Y aunque mis ojos

Su juventud vayan perdiendo,

Ten la seguridad como en otros tiempos

Te seguirán mirando

Como si a ti mujer

Te esculpiera con formas 

De divina diosa

El escultor de los cielos.

Y te seguiré escribiendo

Letras que salen

De estas humildes manos,

Porque mirándote me inspiras

Y expreso lo que siento.

En esta interminable espera

Que produce mi impaciencia,

Mis dedos hablan el lenguaje

De los sentimientos que nacierón

De un corazón en un pecho 

Limpio y descubierto.

Te miré y surgió la magia,

Un halo de claridad

Envolvió tu cuerpo,

Y una música celestial

Se oyó en el inmenso cielo,

Se dispararon los sentidos

Y un temblor se apoderó 

Del mismo cuerpo,

Un desbocado corazón

Volando se escapa

En pos de la luna blanca.


SILVER ©


domingo, 20 de diciembre de 2020

Otra noche

 

De nuevo otra noche

Que va llegando furtiva,

Otro día que se acaba

Y en el horizonte nace

Nuevamente la luna,

Llega para embellecer mis ojos

Cuando cae la tarde

Entre los verdes Olivares,

Dando paso a la oscuridad

Y yo la contemplo en silencio

En mi día que se oscurece.

Esos colores vivos 

Se van apagando lentamente

Cuando las luces

De mi ciudad se encienden,

Se reflejan en las ventanas

Cuando más brillo

Tiene mi dulce Selene,

En su recorrido celestial

Platea los caminos

Sembrandolos de sosiego

Para cuando yo en ellos camine. 

Guirnaldas plateadas

Son sus rayos que pintan

Mis ya grises sienes,

Cómo polvos de estrellas

Que cae como nieve

En las plazuelas y callejas

Dando duende a la muralla

Que contornea las calles,

Rompiendo el silencio

Las campanas de una iglesia.

Luna sin tu presencia 

Me siento perdido,

Se deshabita mi alma

Cómo los árboles

Desvestidos sin sus hojas,

En este invierno incipiente

Largo y frío.

No cantan los pájaros

Entre sus ramas vacías,

Sin hojas ni nidos.

La tarde dejó paso a la noche

En una mala embestida

Y yo mirando al cielo

Sin verte en el horizonte

Te pienso luna.


SILVER ©


sábado, 19 de diciembre de 2020

Se esconde tu nombre

 

Tu nombre se esconde

En el denso silencio

De la quietud de mi pecho

Que me sabe a café

Cuando despierto,

En la madrugada que asoma

Como un regalo por la ventana

Y me descubre la mañana.

Son esas pequeñas cosas,

Pequeños y dulces momentos

Que como cintas de colores

Va envolviendo mi rutina

Haciendo hermosa tus palabras

Cuando me sorprende la aurora

Muriendo el plenilunio.

Apareces y se fugan las estrellas,

Emerges de la luz perdida

Que durante la noche

A hurtadillas se escondió

Tras el inmenso horizonte.

Voy deshaciendo el silencio

Tejido en ese momento

Que la aurora se abre paso,

Saliendo del letargo nocturno

Despidiéndome de mis sueños,

Y en la realidad de tu ausencia

Nace escapando del silencio.

Es en su mismo canto

Que se eleva el espíritu

Buscando mi destino

Tan lleno de vida y sin tiempo,

De un cálido encuentro,

Cuando mis ojos te contemplen

Y te rocen mis manos.

Esos silencios se volverán poemas

Cuando en mi quietud callada

Y en silencio te clame

En cada una de mis letras

Tu callado nombre.


SILVER ©


viernes, 18 de diciembre de 2020

En luna creciente

 

La luna creciente platea

Mi ciudad mientras camino,

El cielo la abraza

Entre su negrura,

Mientras se adornan

El duende de la Navidad 

Se aproxima alegre

Y lentamente se adueña

De sus iluminadas calles.

Son horas de silencio

Que todo lo va llenando 

Mientras en un lento paseo

Mi mente se escapa

Soñando en un nuevo día,

Son horas de suave terciopelo

Que cubren el cielo infinito,

De ilusiones que florecen

En la pupilas de los niños.

Observo callado en mi deambular

Por esas iluminadas calles,

Golpean los recuerdos en mi pecho

Que se perdieron en la oscuridad

Del mismo tiempo,

Horas que transcurren lentas

Y aunque me salve

Vida que sin ser vivida muere,

Caminos que me ofrece

Y la convierte en mi poesía.

Cánticos olvidados

Que se renuevan al paso de los días,

En esas calles se me presentan

Viejos fantasmas que vuelven,

Que en mi pecho renacen

Alegrando mi alma.

Encendidas las luces

Cómo viejas lámparas,

Me obligan a mirar

Recordando esos rincones

Ya olvidados y enterrados,

En esos momentos vividos 

Que con infinita tristeza

Vuelven a mis ojos

En forma de lágrimas.

Y yo te pienso luna,

Te contemplo en lo alto,

Yo te pienso luna

Que me alumbrarás esa noche

Cuando se canta

La buena nueva, 

Porque pensándote se me va 

La tristeza que me envuelve,

Y pensándote mientras a lo alto 

Con los ojos cansados te miro

Me devuelves a la vida.


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jueves, 17 de diciembre de 2020

Mis antojos

 

En este húmedo diciembre

Nace el musgo emergiendo

Entre las grietas de las piedras

Cubriéndolas de verde

Y bajo la tierra esperan las semillas

A la nueva primavera.

En este entorno frío y gris

Extrañando el calor de tus caricias,

Mi piel se hiela

Y mi sombra extraña

La luz que emana

Tu provocadora mirada.

Luna que ilumina la noche,

Ese vacío que mi alma esconde

Y vive en la ironía

Que se oculta tras mis letras,

Esa sonrisa que dormita

Detrás de los instantes agónicos

Hasta regalarte mi hoy.

Luna que eleva mi espíritu

En un sueño interminable,

Te escondes entre las nubes

Esparciendo tu perfume

Cómo amarilla rosa 

En el lejano horizonte,

Siguiendo tu secreta senda

Cuando al alba te esconde

Entre el plumaje de las aves

A coro con su trono

En una armonía inacabable,

Te saludan ¡Oh luna!

Descorriendo el velo de la noche

Niña de mágicos ojos

Y de eterna sonrisa,

El coral de tu boca me turba,

Duende que se filtra

Con sus rayos y camina

Sobre las agua del océano,

Ese haz de luz que ilumina

El corazón de este marinero

Que para ti escribe

Cuando acecha la noche.

Tus ojos me desvelan

En silenciosa esclavitud,

Mis antojos por tus besos,

Y guardo la suficiente distancia

Para no caer en la tentación

Por esos antojos que tengo

Contemplándote a lo lejos,

Diciendo tu nombre 

En mis más hondos secretos,

Calladamente, sin que lo sepas

Te llevo espliego en flor

De las verdes praderas,

En la noche oscura

Cómo tú pelo negro,

Cómo tus negros ojos.


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miércoles, 16 de diciembre de 2020

Luces

 

Me gusta el brillo 

El reflejo de la iluminación 

De Navidad sobre los charcos

Que la lluvia dejó al caer,

Aun no entra esa claridad 

En mi habitación donde 

La oscuridad espera 

Como en un acto de rebeldía,  

Sumiendose para qué la luz

Entre rendijas de nuevo entre,

Es preferible dejarse 

Deslumbrar por esos momentos

Y sucumbir a esos destellos

Que parecen estrellas

Como una supernova muriente

Llegando a hipnotizarte,

Pero es el brillo oscuro

De tus ojos que se reflejan 

En mis mismas pupilas. 

Es tu propio reflejo, 

Y cuando los dejas sin tu luz, 

Entonces van dejando

De irradiar claridad 

Y opacas se vuelven 

Proyectando las notas

De una suave música.

Tienes la capacidad 

Para brillar en noche oscura,

Cómo esas calles iluminadas

Por luces de colores

esparciendo por doquier

Momentos de alegría

Escuchando la melodía

De los alegres villancicos.

Que no nos roben esa luz, 

Esa energía, aunque nos roben 

Esos momentos de más brillo, 

Aunque después nos roben 

La misma vida.

Y aquí vuelvo a estar

Mirando a través de mi ventana,

Viendo cómo cae la lluvia

Brillantes sus gotas

Cómo las estrellas esparcidas

Cuando golpean el suelo

De la ya mojada calle, 

Es un momento en soledad 

En esta noche humeda 

Y como sublime elexir de dioses, 

Saboreo el momento 

Como si fuese el ultimo 

Acto de esta obra 

Poniendo color y calor 

A ese cielo oscuro, 

Que en cada sorbo 

Da una pincelada componiendo 

El cuadro de esta Navidad


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martes, 15 de diciembre de 2020

Sigue las señales

 

Sigue las señales

Que te indican el camino 

Siguelo con la luz 

Que refleja la luna

En la nieve caída

Esta última madrugada,

Quizás así no te pierdas 

En la oscuridad de la noche 

Como ese hogar 

Encendido entre piedras

Consumiendo la madera

Con sus últimas llamas.

La puerta cerrada,

Una luz brillando 

En el alféizar de la entrada,

Se apaga ese fuego

Se consumen las brasas

En un eterno abrazo,

Y, mi juventud se extinguió

Ya hace muchos años,

Cómo cuando se extingue

Cuando llega al mar el río,

La luna en la noche

De un infernal invierno

Con su sonrisa fija

Me alumbra en el sendero.

Es un momento placido, extraño,

Donde las ilusiones duermen

Vigiladas por un ser alado

Dilatando en el tiempo

De ese amor que nació

Quedándose dentro.

Que la misma melancolía

De mi verano extinguió,

Ungido por la brisa

Que muere sobre un lago

Cómo esmeralda reluciente,

La niebla cubriendo

Con su manto sobre la noche,

Unas figuras etéreas 

Se escapan 

Una visión fantasmagórica

Que el corazón alegra

Siluetas fantásticas

En el pórtico de mi fantasía.


SILVER ©

lunes, 14 de diciembre de 2020

Convicción

 

Llegué a la convicción

Que en la noche 

Junto al mar,

Más intensamente se refleja

La blanca luna

Y el canto de las sirenas

Traído por un viento sosegado

Hacia mi oídos

Meciendo las olas

Reviviendo la esperanza

A través de su sueño finito

En las profundidades ocultos.

Atravieso el reflejo de la luna

Cómo un reguero plateado

En el mar oscuro,

En vigilia me duermo

Esperando el aire de tu boca,

Sueño en el abismo

Necesario elemento,

Agua que dona vida

Y las pesadillas ahoga.

Entre tanto amanece,

Y, la ausencia se hace patente

Creando una agonía,

Presencia viva en mi mente,

Cómo fuerte oleaje 

Escapando hacia la orilla,

Niebla que sube

Entre largos suspiros,

Doliente tu vacía cercanía

Trae su cálido aliento

La amorosa luna

En su suave y lenta agonía

En su decreciente andadura.

Aceptar no es resignarse, 

Porque quien acepta gana 

Y quién se resigna pierde,

Tan solo es un espera

Que aunque tardía,

Alumbra la noche

En lo más alto Selene 

Aún permanece cautiva

De sus propias indecisiones.

Es mi convicción,

Con o sin razón,

Con la esperanza siempre

Arraigada en el corazón,

Nuevos deseados días,

Alumbre en mis noches

Y mi prosa inspire,

Antes que el amanecer

Por el horizonte asome.


SILVER ©


domingo, 13 de diciembre de 2020

A ti que naciste en esta tierra

 

A ti que naciste en esa tierra

Que está entre sol y luna

A quien debo lo que escribo 

Desde ese mar que fascina,

Cerca de las estrellas

Navegando por esos océanos

Para guiar mi humilde pluma

Inspirando mis letras.

Plasmo ese amor en mi prosa

Que sin ser poeta busca

Por el mundo tu belleza

En otras caras, otras miradas,

Pero siempre capitana

De mi vagel blanco,

De todo lo que escribo,

Encontrarte a ti luna

A quien debo mis versos.

Me basta con mirar tus ojos

Para hayar mi refugio,

Me basta saber que vives

Sin saber de distancias,

Porque el cielo existe

Desde que la brisa

Acaricia tus labios

Y se recuesta el sol

Entre tus doradas dunas.

Y seguiré navegando

En la misma cruz del sur

Contemplandola desde mi barco

Para que me guíe

Al norte, a tu regazo.

Seguiré navegando

A qué no sea en vano

Entre arena y mar

Jugando con las olas,

Contando las estrellas

Del firmamento ansiando

Hasta llegar a tu puerto.

El silencio de la noche

Envuelve mi nao,

Se agita el mar

Golpeando la quilla,

En el horizonte se dibuja

La línea sutil del alba

Asoma entre su negrura,

Yo soñador y viajero

Aún ausente en tu mirada

Tus ojos son mi destino.


SILVER ©



sábado, 12 de diciembre de 2020

Aún creo

 

A pesar de todo,

Creo en el poder

De la pluma,

De la palabra escrita,

A pesar de todo,

De lo vivido, y lo que desviví 

Lo cierto, en lo incierto,

De tantos desencuentros

A pesar de la vida,

De todos los que la muerte

Se llevó.

Del engaño y desengaño,

En la mano abierta de un amigo,

De los amores rotos,

De los sentimientos caídos.

De tantos desaciertos,

De la presencia olvidada,

Del amor y desamor,

De las alegrías y tristezas,

De los sueños escondidos

Perdidos en la almohada,

El silencio de los te quiero 

De mi triste mirada.

De estos versos,

De la luna en su alborada,

De los amaneceres rotos,

La soledad de un atardecer

En una playa solitaria.

A pesar de los besos,

Del deseo escondido

Detrás de la piel,

Del corazón malherido

Lágrimas con sabor a hiel.

Creo en el poder 

De la palabra escrita,

De mi pluma,

Mojada de roja tinta

Del tintero de mi corazón,

En la palabras dada.

Aun creo en el amor,

En los duendes traviesos,

En las hadas del bosque

Y en los faunos tocando

Una melodía con sus flautas,

Creo en los magos,

En las brujas con sus hechizos 

A la luz de la luna blanca,

Creo en la magia de tu ojos

Y en la sinceridad de tus besos.

En tus manos fuertes

Que acarician suavemente,

Creo en ti sin recovecos,

En tu alma...

En las noches sin luna,

En los días grises, con brumas.

En el frío invierno,

En el renacer de la primavera,

En el verano...

Cuando el mar nos llama,

En este otoño que nos deja

Con el rojo encendido

De las hojas de los arboles

Cuando caen de sus ramas,

Creo en la vida

Qué día a día se nos escapa.


SILVER ©


viernes, 11 de diciembre de 2020

Por querer quiero

 

Cómo no desear

Contemplar la luna

Cuando empieza la noche

Después que el atardecer

Perdiendo su virginidad,

Cuando asoma brillante

En el oscuro horizonte.

Cómo no querer

Vivir en cada latido

De su tierno corazón,

En esos escondidos suspiros

Que se ahogan en su pecho

Cómo en una cárcel

De duros barrotes.

Sin querer queriendo,

Abrazo el silencio

Sorbiendo de sus labios

Las palabras calladas

De su voz en mis oídos,

Estremeciendo cada fibra,

Cada átomo de mi cuerpo

Y con los ojos cerrados vuelo.

Cómo no desear,

Si es lo que más deseo,

Volar con la velocidad del viento

Hasta la aurora que renace

En la eternidad de un beso,

De sus ojos que acarician

Con la profundidad de su mirada

Que desnuda mi alma

Y despierta mis anhelos.

Por desear deseo

Que lo que escribo

En la noche se haga verso,

Fruto de la inspiración

Que cada crepúsculo me regala

Y brota entre su pecho y el mío

Para deleite de su corazón

Que cansado, antes que 

Sus ojos se cierren

Cuando acecha el sueño.

Por querer quiero

Que no broten tus lágrimas

Ni que el llanto te ahogue

Y viva en ti la magia

De las hadas del bosque,

Cuando la luna con sus rayos

Hiere la oscuridad de la noche,

Y su canto te arrope

Con la caricia de mis labios

Transformándose en besos.

El pensamiento se hace verbo

Dando a la vida color,

Yo por querer deseo,

Y por desear quiero,

Que el carmesí de tus labios

Consienta en mi prosa

Te entregue el fuego

De mi alma eterna.


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jueves, 10 de diciembre de 2020

A tu espalda

 

Mi pecho a tu espalda

Se arremolinan mis manos

Desde tu vientre

Hasta tus senos,

Al retrasarse tus pasos

En la frontera del sueño,

Yo tan voraz,

Tan inquieto,

Pecho adosado a tu espalda

Con el corazón sin frenos,

Abrígame ésta noche,

Y olvidemonos del alba.

Durmiendo sentirás,

El calor de mi abrazo,

Escondido estaré

Detrás de tu espalda,

Cobijandote en el sueño,

Mis manos jugueteando

Con tu enmarañado pelo,

Deslizo mi boca

En tu morena espalda,

La deslizaré suavemente

Escuchando el sonido 

De tu limpio corazón,

Y en ese abrazo

Me sentiré perdido.

A ti me llevarás,

En forma de amor,

Sin tiempo,

Sin distancias,

La noche nos atrapará

En un silencioso manto

Y a oscuras me sentirás

En esas horas de misterio,

A ti me acercaré,

Abrazándome a tu espalda,

Depositaré en tu cuello

Un sentido beso.


SILVER ©


miércoles, 9 de diciembre de 2020

Manantial de luz

 

Un río de luz me llega,

Manantial de esperanzas

Donde tus ojos

Alejan las penas,

Dulce crecida

Llevando versos

Que desde el corazón 

Se escriben,

Donde las ilusiones

Se mecen,

Más allá del espacio

Sin tiempo.

Tu río de luz

Cae en cascada,

En el remanso de mi alma

Cómo el cristal mismo

Transparente y diáfana.

Escrito en el cielo queda,

Con nubes ardientes

Coloreando el firmamento,

Soñando despierto

En el río de luz

De tu mirada.

Manantial que mi sed calma

Alivia mis penas

Cómo canto de primavera,

Sintiendo el perfume

De las flores de la pradera,

Llévame a tu cauce,

Las manos entrelazadas,

Volvamos a ese instante

Donde tu río de luz

Me alcanza.

Ese río de luz

Que me trae la suavidad

De la brisa cuando

Mece las ramas,

Esa hermosa caricia

Que me regalan tus ojos,

La luz de tu acento

Que acaricia mi pensamiento.

Río de luz,

Suave como el agua

Que roza mis mejillas,

Repartiendo sueños

En la poesía que me inspiras,

En las estrellas de seda

Cuando nace la aurora,

Ese río de luz 

Que disipa mis sombras.


SILVER ©


martes, 8 de diciembre de 2020

Se desvanece la tarde

 

Se va desvaneciendo la tarde

Transformándose en noche

Mojada y fría,

Donde los silencios se adueñan

De las oscuras calles,

Mantienen callados 

A los furtivos amantes

Mientras contemplan

La luna menguante.

No se mueven los pétalos

De las rosas en sus tallos

De afiladas espinas,

Ni las hojas de los árboles

En la quietud, en la calma

Que poco a poco se apodera

De nuestras vidas,

Nada se mueve,

Ni tan siquiera los bemoles

De una inacabada melodía,

Noche fría y oscura

Esperando un nuevo amanecer,

A un nuevo día.

La luna languidece

Perezosa y pálida

En la curva del oscuro cielo

Mientras yo pienso

En quién provoca mis desvelos.

A soñar perdí el miedo,

Cómo a expresar lo que siento,

A extrañar mis letras

Cuando a estas horas

Tardías escribo 

Con mi eterna pluma,

Dejando atrás lo superfluo

Llenando con mis palabras

La luna que quiera

Entra por mi ventana

Siempre entreabierta.

Flotando mi mirada

Testigo mudo del invierno

Que gris se avecina,

Cae despacio la noche

Y los vacíos de los corazones

De los que nunca se amaron,

De las manos que no acarician

Y de los besos que se van olvidando

Cuando los abiertos ojos

No miran ya la luna

Y el alma se marchita.


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lunes, 7 de diciembre de 2020

Vertigo

 

Vértigo al contacto 

Con el mar de tu piel,

Tan parecido al subir y bajar

De la espuma al roce de las olas,

Y en las profundidades marinas

Donde el delfín se adentra

En los negros abismos

Donde la corriente

Explosión hace

En continuos gemidos

Donde el sol no traspasa

El umbral de la fantasía

Perdiéndose en la oscuridad

Cómo en la ingravidez del cosmos.

Y yo hábito en los pequeños

Y grandes acantilados

Aferrando mis ansias

Cuál liquen enmedio del huracán

Teniendo en mis manos

El sol y la luna cautivos.

Y escribiría poemas de amor

En el nácar de la espuma

Cuando rompe las olas

En los acantilados desafiando

Las nubes del cielo,

Piedra que permanece callada

Bañada por el agua

Cuando sube la marea

Vistiendo el mar de deseos.

Y el viento azota mi cara

Rompiendo mis pensamientos,

En esa pasión oculta

Escondida bajo mi pecho

Cedo mi prosa al viento,

A la sal, al alba,

A ese íntimo contacto

De tus pies en las aguas

Acariciando tu suave piel.


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domingo, 6 de diciembre de 2020

Que encierra el mundo?

 

¿Qué encierra el mundo?

El canto en los corazones

Una única y larga guerra

De batallas sembradas,

No es la verdad de la vida

Aunque la sangre mana,

Las guerras destruyen 

Se asienta el sentimiento 

Y la vida alaba.

Encierra la noche

Cuando la blanca luna

Allá en el horizonte,

Acaricia el mar

Con su suave roce.

Dejan el corazón abierto

La de la vida que siembra

El amor en cada trinchera

Y me hacen escribir

Cada dia versos.

Amantes que no pueden 

Tocarse se llenan de besos

Cuando en la noche

Se encuentran en los sueños,

En una nube de algodón 

Que la luna blanca esconde,

Que quita mis penas,

Y para mis penas

Su luz eterna y serena,

Eres ángel, estrella,

Rayo de plata

De mi luna blanca,

Para mí alegría y esperanza.

Asómate a mí ventana

Por la noche desde el cielo,

Tu luna plateada

Que luce brillante y fresca 

Entre las estrellas del mismo

Centro del firmamento

Para que llenes mi alma

Asómate a la alborada,

Asómate luna, a mi ventana

Líbrame de las guerras

De las trincheras oscuras

Que llevo dentro.


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sábado, 5 de diciembre de 2020

Y llegó el amanecer

 

Y llegó el amanecer

Con los sentidos

Aletargados por el sueño,

Aprisionados por los efectos 

De la pasada noche,

Donde los silencios sin sombras,

Cómo un vicioso círculo,

Tejido como una telaraña

Encerrando los pensamientos.

Viejos fantasmas

Que oprimen el pecho,

Solo tu voz en la lejanía,

Me vuelve a la realidad,

Dejando atrás

El viento helado,

Endulzando paciente

Un corazón amargo.

Envaino el pasado,

El lado oscuro

Esperando el alba encendida,

Con el reflejo de tus ojos,

La única negrura,

El calor de tus ojos negros.

Y todo se vuelve más claro,

No basta para contener,

El tacto de tu mano

Cómo el más suave terciopelo,

Y despeja la oscuridad

Con un movimiento de tu pelo.

Sintiendo mil caricias

Latiendo en mis dedos

Me llega en tu mirada.

No quisiera que se apague 

La luz de mis ojos

Y que no puedan contemplarte,

Ni que se calle mi boca

Para susurrar tu nombre,

Ni que se queden sordos 

Mis oidos para oír tu risa,

Que no se queden sin tacto

Mis manos por no tocarte.

Que mi nariz no se quede

Sin oler tu perfume,

Que mi alma no se marchite

Por no amarte

Y mi corazón se hiele

Por no sentirte.

No quisiera que la locura

Que me haga olvidar

Los lunares de tu espalda,

Quisiera que el fuego

Del infierno me devore

Antes que mi mente

Se quede a oscuras,

Estés en mis pensamientos

Y cómo ave fénix

Una y otra vez renazcan


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viernes, 4 de diciembre de 2020

La musica

 

Tejo la suave música

En las horas secretas,

Tejiendo al mismo tiempo

En una sinfonía las ausencias,

Música que inevitablemente

Deshoja los pétalos

De una blanca margarita

En un largo sostenido

En busca de tu caricia.

Soñando sin sueño

Profundo y verdadero,

Pensando sin pensar

Todos mis te quieros,

Cuando mi palabra

Llena de sentido

Forja la música

Resplandeciente y lúcida

Lo que siento,

Dueña de mis sueños,

La música de tus labios

Encienden la hoguera

De llamas trémulas,

La música alegre

De mis eternos pensamientos.

Sigilosa mi alma

Que implora tus besos,

Íntima posesión,

Vértigo sin tu presencia,

Música y corazón

Piden tu regreso.

Suspirando sin suspirar,

Y respiro sin respirar,

Olvido la noche,

Respiro hondo

El aire es fresco,

Volviendo a tejer 

mi dulce música

Que para ti lanzo

Al cielo, al viento,

Con la partitura inacabada

Que se va componiendo

Y al unísono suena

El batir del bronce 

Al repicar de las campanas 

De una vieja iglesia

Y que acarician tus labios

Como si fueran besos.


SILVER

jueves, 3 de diciembre de 2020

Cruzamos el puente

 

Cruzamos ese puente

Frondoso de flores 

Y de plantas verdes

Que por debajo corre el agua

Como cristal transparente,

Hoy no solo hay amaneceres 

Oscuros y rotos,

Hay también abrazos 

Y cafés compartidos,

No hay tristeza en los ojos

Ni corazón sin latidos.

Hoy no hay días tristes 

Después de calles mojadas

Y cielos ennegrecidos, 

No hay una oscura tumba

Por un corazón roto

Curado de sus heridas,

Siempre habrán besos

Y sentimientos aunque estén

En el alma escondidos,

Hoy habrán te quieros

Detrás de un arbolado

Frondoso y verde,

Triste es la tumba

De los momentos olvidados,

Pero hoy no se esconde

El tiempo que te regalaron,

Hoy es el día del amor 

Que palpita en mis manos

En el día que me pides

Que mi puerta abra,

Saliendo la luna llena

Me desprendo de forma 

Delicada de la larga espera.

Hoy recobro la sonrisa

Perdida entre cielo y tierra,

Resbala por un momento

El inexorable tiempo,

Creciendo mi deseo

Que mece el eco de tu sonrisa

Entre mis sábanas.

Hoy no es de frío

Pero tiemblo cuando 

Tus senos me desafían

Cómo brasas ardientes,

Hoy tus brazos me envuelven

Y, yo, tan impaciente,

Hoy brillan tus ojos

Borrando mi pasado

Perdiendo mi futuro

En la penumbra de la alcoba,

Hoy se para el tiempo,

Todo alrededor de adormece.

Hoy la luna turbada se esconde

Y su mitad crece

Tímidamente en la noche,

Siendo testigo mudo

De nuestro encuentro furtivo

Nuestro astro

De luz blanca y dulce.


SILVER ©


miércoles, 2 de diciembre de 2020

En la noche

 

En la noche

Cuando salen mis letras,

En el marco de la oscuridad

Se crecen los poetas

Mirando la luna,

Donde se roban besos

Saludando las estrellas

Enmedio del camino

Bordeado de flores

De las últimas que en este

Otoño quedan.

Un trovador canta

Sus canciones bajo la luna

Hechizado por la belleza,

De mirada profunda donde

Se refleja a medianoche.

No le importa 

Que se arrugue tu cara

Con el irremediable paso

Del cruel tiempo,

Es el aroma de tu piel

Lo que desea,

Y es en tu corazón,

Donde tu hermosura madura,

Inmortal en tu alma.

Dueña y señora

De una perenne sonrisa,

El nácar de tu boca,

Es su eterno delirio,

A tu belleza,

Canta el poeta,

Te escribe su poema

Cuando rompen las palabras

En la cresta de una ola,

Sentimiento que nace

En cada letra.


SILVER ©


martes, 1 de diciembre de 2020

Te mereces un trovador

 

Mereces una prosa,

Una canción o un poema,

Mereces un trovador 

Que te cante suave

Bajo las estrellas,

Junto al rojo fuego 

Que crepita en la hoguera,

Ese trovador de sueños

Enredado en tu melena,

Canta bajo tu ventana

En esta vasta tierra,

Sonata perfumada 

Por una amarilla rosa,

Sonata de primavera

Que se engalana 

Con la luna llena.

La luz de la lejana Selene,

Envidia de amantes y poetas,

Arrancas de mi pluma,

De mi tintero

Con tinta violeta,

Letras que emanan

Dulce como la ambrosía,

Manjar de dioses

Endulzando mis días.

En la noche, junto al río

Va asomando el verso,

Envidia de la rosa,

Esencia que corre

Perfumando sus venas,

El canto del amanecer,

Se vuelve íntimo, en silencio,

Y mi poema se transforma,

Con una rosa en el pico

De una blanca paloma,

Que emprende el vuelo

Hacia tu iluminada

Ventana abierta,

Para no perder el rumbo

Alumbrando el camino.


SILVER ©


lunes, 30 de noviembre de 2020

Vivo, existo

 

Vivo porque me piensas,

Existo en tu mirada,

Solo en tu voz

Mi nombre mejor suena

Cuando vas pronunciando

Todas sus letras,

Y, cuando sonríes

El universo se expande,

Comprendo su enigma

Por todas las estrellas 

En el nácar de tu boca.

Tu amor me has enseñado,

En ese instante primero

Que me miraste,

En ese breve momento

Que nuestras miradas

Se fundieron cómo luna 

Y sol en un eclipse,

Sentí que era un riesgo

Que por el lucharía

Aunque me hunda

En el mismísimo infierno.

Cuando te robé,

El primer beso,

El primer abrazo,

Devoré los segundos

Ávido de deseo, de tus labios,

Llevo de tus ojos la luz

Guardada en el baúl

Cuál intrépido pirata

De los mares del sur,

Cómo su más preciado 

Y único tesoro

Te miré como cuando

Ve tierra por vez primera

Después de una travesía

Tormentosa y larga.

Porque es mi elección,

Con la certeza,

Que pongo mi corazón

Leyendo en tu alma,

Quisiera ser el poeta,

Que para ti escriba

Cada renglón, cada letra

De una poesía eterna

Que no la marchite

El paso del tiempo.


SILVER ©

domingo, 29 de noviembre de 2020

Cuerpo, verbo y versos

 

Ya es de noche tras los cristales

Empapados por el frío otoño,

Se va cayendo majestuoso

Esperando el nocturno letargo,

De ese refugio de mi habitación

Quitándome el sopor de los ojos

Que somnoliento me impiden

Ver la luz del atardecer.

Otro día que se va, otro más,

Esperando una nueva oportunidad

Que me de la noche

Aunque el azul del cielo

Quede cubierto por las nubes,

Quizás sea la soledad

Que oprime mi alma

Presagiando un duro invierno.

Los seres mágicos de la noche

Que habitan entre las ramas 

De los ya desnudos árboles

Revolotean madrugadores

Y a los lejos se oye el primer canto

Del búho en lo alto del campanario

De una iglesia solitaria.

En esa quietud plácida

Que nos depara la noche,

Me dejo llevar por esa atracción

De lo que de verdad se ama,

Regresando en forma de canción,

De luna, de silencio,

Y el canto del mirlo

Me trae el recuerdo de las palabras

Que mis sentidos han oido

A susurros dichas por tu boca.

Se hace la noche oscura,

Pasearé mirando las estrellas,

La luna me alumbrará

Y el sonido de tu risa

Me acompañará mientras camino,

Y entonces tú cuerpo 

Se hizo verbo, el verbo besos,

Los besos, fresas en flor,

Cubiertas de la humedad

Incipiente de la noche fría.

Dulzura y pasión de una boca

En todo su señorío,

Ojos que me turban

Altivos y con tronío

Labios floridos de carmesí 

En su esplendor, traviesos,

Mi condenación...

Cómo tributo al amor.

Cuerpo moreno,

Pechos que me desafían,

En mi piel impregnado

Sutil y perfumado,

Morirme quisiera

Besándote con mi último aliento.


SILVER ©


sábado, 28 de noviembre de 2020

Quizás sea

 

Desperté con sensación de frío

Cuando nacía la madrugada,

Quizás sea la falta de calor

O que la madruga se enfrie

Cuando cae la lluvia,

O que esa mano caliente 

No está apoyada en mi pecho

Dando calor a mi corazón.

Quizás sea la soledad

Que había tenido hasta ese día,

Quizás sea fiebre

Y el frío de la noche no se disipa,

Quizás sea todo eso, quizás,

Pero ese frío siento,

Quizás sea, porque

Mi cama está vacía.

Esas hojas que cubre la tierra

Cómo alfombra del color del otoño,

Oyendo las palabras silenciosas

Cuando la brisa acaricia mi cara,

Quizás porque oigo los silencios

Que me llegan al alma,

Quizás porque oigo las noches

Oscuras y sin miedos.

Quizás sea que los días cambiantes

Se va adueñando el invierno,

Y con este frío que se impone

Apetece quedarse entre las sábanas,

Pero falta tu tibio cuerpo,

Tu corazón ardiente

Y mis ojos somnolientos

Vean la belleza de tu alma

Olvidándome del tiempo.

Quizás sea que cuando sonríes

Se abren la puerta del cielo

E iluminando estos ojos

Ya viejos y cansados

De ver tantas almas

Que se van marchitando.

Quizás sea porque

No pueda ver el azul

Oscuro del firmamento

Y esos puntitos de luz

Donde se acunan los sueños,

Antes de que se me cierren los ojos

En ese último suspiro me dormiré

Deseando que al alba

Me devuelva a la vida.

Quizás sea que cuando 

El crepúsculo da paso a la noche

Cubriéndolo de estrellas

Y la luna resplandece

Cuando tú las miras,

Y yo les quitaré el velo

De nubes blancas

Para que tú las contemples

Con la profundidad de tus ojos,

De tu misma mirada,

Y, de tus pestañas tienen celos

La mágica noche estrellada.

Quizás sea que tendiendo 

Su manto la luna traviesa 

Esconde su mirada

Lentamente bajo el agua,

Sintiéndose avergonzada,

De esconder sus ojos de embrujo,

Y esperando al amanecer

En bendita calma

Soñando la alborada,

Quizás sea que tiene la luna, 

Las noches y sus mañanas,

Quizás sea que la vida

Me regala la luz de tus ojos

Y la dulzura de tus miradas.


SILVER ©


viernes, 27 de noviembre de 2020

Guíame luna

 

Lejos está ese lugar

Donde nace el río

Entre cañaverales sumergidos

Cómo las palabras guardadas

Que brotan de nuevo

Desde ese espacio escondido

Tan solo velado por los sentimientos.

Luna muéstrame el camino,

¿Dime donde habitan las hadas

Que por las noches te danzan

Entre los fuegos fatuos

Que nacen de la nada?

Guíame entre las nubes

Que se desparraman por el cielo,

Hacia ese lugar

Donde habitan los sueños

En lo etéreo de mis versos.

Guíame por esas sendas

Que conducen al mar

Donde como en un espejo,

Mientras las olas y el viento

En coro cantan a tu reflejo.

Guíame luna; muéstrame la señal

Que brote de tus labios

Y aunque en ellos

Se esconda la palabra

Yo haga un poema de tus besos.

Muéstrame la vida

Que trascienda de la luz

En el sosiego mientras escribo

Ese nuevo verso que preciso

Para describirte en cada letra,

Que universalice tu figura

Y el alma que esconde tu  pecho.

Guíame luna en el silencio,

En la paz que florece

Cuando sonríe tu boca

Y vibra la vida con tu risa,

Guíame para que cobre

Vida mi pluma,

Para que nunca

Dejes de ser mi musa.

Noche clara de Luna 

De hadas risueñas,

Noche de duendes;

Noche que me recuerda,

Instantes compartidos,

Me desvela tu silueta

Y mi mirada perdida

Hacia el oscuro techo,

De esperanza impregnada.

Guíame luna,

En noche clara que me inspira

A escribir nuevas letras,

Que descubre el paraíso

En cada uno de tus ojos

Y en tu rostro, los sueños;

Que mi pluma dibuja

Cómo en un blanco lienzo.

Guarde esos pétalos

De rosas amarillas,

Cómo un relicario en mi pecho,

Cómo un talismán,

Como una reliquia que venero,

Guíame luna,

Para pensarte y soñarte

Con todas mis ganas,

Para sentir cada palabra

En mi alma escrita,

En esta noche trémula y clara.


SILVER ©

jueves, 26 de noviembre de 2020

Se hizo la noche

 

Y se hizo la noche 

En el camino oscuro

De los recuerdos,

Alumbrados en la lejanía,

Por un farol viejo

Lentamente como en un cementerio,

En el umbral del tiempo,

De los amargos besos.

En tu muñeca,

Una partitura inacabada,

Presagio de nuevas esperanzas

Que en su clave,

Tú laberinto alumbra.

Y al final estoy,

En ese sendero curvo

Que cautiva tiene tu alma.

Allí estaré...

En esa vieja estructura,

¡De pie!

Con las manos cruzadas,

De paciencia enfundado

Cómo en retablo barroco,

En el altar de los sueños.

Allí estaré..

Esperando que alejes

Viejos amores,

Que no descubrieron,

En esa escondida habitación,

La grandeza de tu corazón,

No...

No vieron tu alma

Esos negros profundos

Que derrocha calma,

Y ellos, como cobardes huyeron.


SILVER©

Ahí viene!!

 

Ahí viene, miradla a los ojos,

Hablan sin palabras,

Es poesía, verbo hecho mujer,

Única que contempla

La desnudez de mi alma,

Que de una sola mirada

Es capaz de estremecer

Todas las fibras de mi cuerpo.

Ahí viene, miradla,

Me quedo perplejo

Accelerando el ritmo de mi pulso,

Es un ángel,

Y aunque no las vean

Bate sus alas al viento,

Ahí está, siempre atenta

A pesar de sus pesares,

Aún cuando se marchita

Su corazón cansado.

Y yo aquí estaré

Escribiendo para ella 

Mis inspirados poemas

A cada atardecer,

A veces tristes, otros alegres

Cuando deja paso

A la inminente noche,

Siempre en cada palabra

Una flor le envío

En estos últimos versos.

Compraría esos sueños

Que se quedaron en el camino,

En cada letra que escribo,

En cada suspiro

Que de golpe sale de mi pecho,

Arrancaría esos momentos

Que opaca la luna

Cuando llegan las sombras

De todas sus tristezas.

Ahí viene, miradla a los ojos,

Camina lentamente

Oculta tras el silencio,

Absorbe todo a su paso

En esta noche fría

Emanando de sus ojos,

Eternamente, la magia.


SILVER ©


miércoles, 25 de noviembre de 2020

A ti mujer

 

A ti mujer de luna llena

Engrandeces mi figura,

Qué compartes mis sueños

Cuando te desnudas

En infinitas auroras,

Llenando los vacíos,

Añorando caricias.

A ti mujer, blanca paloma

Eterna como tu risa,

De ti hablé a las rosas,

Al viento, a los elementos,

Que vences a la noche

Tan solo con tu mirada

Rompiendo los silencios.

A ti mujer, eterna amante

Que disipas las tristezas

Fulminando las acaricias

Sembrando el cielo de estrellas

Cuando en las noches oscuras

De luz llenas,

Descubriendo la música

Y despertando en tu corazón la vida.

A ti mujer, que cada día vives

Esperando ese milagro

Persiguiendo tus sueños

En el tiempo que transcurre

Dejando huella en tu rostro

Te hace más bella,

Enhebrado cadenas de seda

Sin que tu boca esquive una sonrisa

Y el embrujo de tus ojos

Los campos floreces.

A ti mujer, esos instante 

En que mudo quedo,

Cuando solo hablan

Tus escondidos sentimientos,

Dame tu mano,

Quédate dormida en mi hombro

Que sereno velaré tu sueño

En esas noches plagadas

De nuevas nostalgias.

A ti mujer, el murmullo del mar

Te arropa con la brisa,

Alargan sus manos

Sobre tu cálido pecho

Bañando tus pies las olas,

Que hallan el descanso

Sobre la clara arena.

A ti mujer, más allá de mis ojos

Te miro y sigo callado,

El mar no se atreve 

A borrar tus huellas

Cuando caminas

Por sus eternas orillas,

A tu lado me siento,

Sigo callado para que solo

Se oiga tu voz por todos 

Los rincones de la tierra.


SILVER©

martes, 24 de noviembre de 2020

Escucha

 

Escucha el viento

Que te llevan las fantasías

Las hadas y los elfos

Que cuidan de la noche

Antes de que nazca el día,

Desde ese momento

Te dedican sus alegrias,

Te empujan a abrir las alas

Para surcar nuestro cielo,

Y tendiendo tus manos

Vas apagando el silencio.

Escucha en este atardecer

Mis letras cenicientas

Que se vistieron de gala

Con tu cándida presencia,

Que se encendió la lámpara

En un corazón pleno de oscuridad,

La luz hace más nítida

Las palabras desvanecidas

En las tinieblas previas al plenilunio,

Escucha el mar que retorna

De un sueño antiguo,

Que la silenciosa marea

Deja mis mensajes

En esa playa dorada

De mi alma que te desea.

Así mueren mis tristezas

Lentamente sin agonías,

Escucha la sonrisa del mundo

Mientras la soledad

Las lágrimas amargas

Se convierte en sonrisas

Cómo las hojas en otoño

Cubren la tierra del bosque

Para preservarla del frío

Invierno, esperando,

A la primavera para renacer

Cómo las flores, de nuevo.

Escucha esas palabras

Silenciosas como la brisa

Acariciando suavemente tu cara,

Esos silencios que llegan

Hasta en lo más profundo del alma,

A tu corazón, a pecho abierto,

Escuchate en las noches

Oscuras, sin miedos,

Hasta que te llegue el sueño,

Escucha a ese hasta luego

Que ya no duele,

Esas heridas abiertas

Que dejaron de sangrar,

Escuchate cuando lloras

Y como florecen tus lágrimas

En tu memoria que me llama

Cuando la noche acaba,

Escucha el sonido de mi voz

En la oscura madrugada.


SILVER©

lunes, 23 de noviembre de 2020

Tientas al tiempo

 

Para mi dulce Cantabra!

Tientas el tiempo,

Eternidad en tu caminar,

Despacio, inigualable en tu paso,

Tiempo que se hace eterno,

Nervioso me siento,

Vibro, respiro,

Inunda con tu perfume

Cada rincón de mi cuerpo,

Mi corazón se desboca

En la puerta de mi pecho.

Tu sonrisa, todo lo llena, todo...

El amor, el universo

En el éter desafiando al cielo,

Sonrisa que alumbra mi vida,

Que me regala la fresca brisa.

Mi mano te ofrezco,

Mi corazón ya no lo tengo,

De la mano paseamos

Viendo pasar el tiempo,

Miradas furtivas,

Gestos que invitan a las sonrisas,

De donde salen mis versos

Que tímidamente se dibujan

En nuestros labios,

En nuestros ojos

En nuestros pechos.

Con la candidez de un querubín

Y la suavidad de un beso,

Cómo una aparición virginal

Entre los colores del arcoiris,

Paras las horas,

Paras el viento en tu caminar

Y las flores te rinden

Culto en el altar

De los guardados sueños.


SILVER 

domingo, 22 de noviembre de 2020

Prisionero de los sueños

 

Prisionero de los sueños rotos

En la ausencia de tu mirada

Esta silente noche

Que golpea los cristales,

Y esas negruras que asoman

Que esconden la luna,

Este silencio roto por el viento

Incesantes tras la ventana

En este otoño húmedo.

La flor de la noche

Se esconde detrás del muro

Que rodea mi casa,

Recuerdos de aquellos instantes

Compartidos entre las paredes

Ocultos el sol y la luna,

Silencio que se embriaga

Con tu penetrante perfume,

Mi conciencia se nubla

Cómo en un sueño

Entre las tinieblas,

Y me dejo seducir

Por tu eterna sonrisa.

Mis palabras lejanas

Vuelan aún a través del tiempo,

Esa poesía inacabada

Siguen tras tus huellas,

Vestigios de un amor

Que surgió del Edén de mi alma.

No soy más que lo que escribo,

Sin más pretensión

Que escribir lo que siento,

Incesantes letanías

Cómo salmos en un convento,

Plegarias que lanzo al cielo

En esta noche que se adormece

Entre los suaves susurros de la brisa

Que sopla intermitente, 

Y yo te pienso a oscuras.

Quizás no sean suficientes

Mi corazón y mi vida,

Mis manos que por ti escriben,

Esta luna que se refleja

En el mar de mi tormento.

¿Y mis deseos?

Que en mi vivas,

Que sea dueño

De los suspiros de tu pecho,

Que yo sienta tus miradas

Aunque no estén tus ojos abiertos,

Que en cada latido

De tu corazón

Suene mi nombre,

Que cada verso 

No sea condenado al silencio.

Que enmudezca el viento,

O que sople en un lamento,

El anhelo por la vida,

Que mi voz rota

Grite al cielo que existo,

Porque tú soplas 

El aire en mi pecho.

Que pasen los años,

Y en mi rostro cuarteado

Por el levante traicionero

Siempre brille una sonrisa,

Tantos deseos...

Tantos deseos...

Cuantos anhelos...

Cuántas ilusiones compartidas,

Abonando la tierra

La lluvia en cada una de sus gotas

Que tu nombre lleva

En el sonido transparente

Cuando sigue cayendo

Golpeando tras los cristales.


SILVER ©


sábado, 21 de noviembre de 2020

Convulsiona el sol

 

Convulsionado está el sol,

Cuando las nubes hacen

La noche mas oscura,

La brisa fresca de este otoño

Desenreda la quietud

Iluminando la luna las nubes,

Resplandeciendo el atardecer

Filtrando sus rayos

Entre sus rendijas.

Me basta con tu sonrisa,

Tiempo perfecto para mi calma,

Y mi voluntad quiebra

Rindiendome a tu risa,

Brújula de la noche

El brillo de tus ojos,

Que me guía hasta tu seno,

Deseando tu pecho,

Besando tu ombligo.

Y acariciar tu pelo,

El aroma indescriptible

Y la suavidad de tu cuerpo,

Isla donde me perdería,

Alimentado mi vida,

Llenando mi sequía

Cómo lluvia de primavera,

Siendo mi guía

Por los senderos de flores

Dando el verdor a los bosques,

Tú la flor única de mi pensamiento,

Para ser tu selva frondosa,

Dejé de ser desierto.

Se abre el cielo y aparecen

Miles de estrellas iluminando 

Estos ojos viejos 

Cansados de ver la negrura 

De unas almas marchitas 

Centelleantes en el azul 

Oscuro del firmamento, 

Esos puntos de luz 

Donde se acunan los sueños, 

Allí plácidamente me duermo

Y en ese ultimo suspiro 

Antes de que se me cierren

Mis cansados parpados

Desearé que al alba

Tu sonrisa me devuelva a la vida. 


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viernes, 20 de noviembre de 2020

Quietud

 

Aparente quietud que nos da

La tarde que muere,

Las nubes se retiran

Para dejar paso de nuevo

Al azul oscuro del cielo

Abrazando la noche.

Despacio despierta el búho

Y los ojos de los gatos

En la oscuridad brillan,

A lo lejos maullando

Con un lastimero canto

Un gato buscando 

Su hembra esquiva

En la emergente luna.

Quedo solo mirando por la ventana

Esa calle aún mojada

Por fría humedad,

Con la mirada perdida

Soñando con tus besos,

El frío quema las entrañas

Y añoranzas destila el otoño,

Trazo una senda con mis huellas

Hasta donde acaba el pensamiento,

Allí donde tan solo llegan

Los que por la noche sueñan.

Aunque esten lejos,

Pero que en un salto

Y estirando los brazos,

Con una simple mirada

Se alcanzan las estrellas,

Cuando en el firmamento asoman,

Esta fresca tarde 

Que irremediable se escapa

Y las yemas de mis dedos

Se vuelven insensibles con el frío,

Cuesta coger la pluma,

Cuesta no perder el hilo

En esa lucha por mantenerla

Firme mientras escribo,

Haciéndose notar la fría tinta

Cuando se desliza entre mis dedos.

¡Aún así! Mi corazón

Permanece caliente

Cómo en una eterna primavera,

Abriéndose paso a cada latido

Que suena en la cavidad

De mi pecho que esconde

Todos esos poemas 

Que aún no he escrito.

La lentitud de la escritura

Cómo tango melodioso,

Bailan en mi cabeza las palabras

Que se entrelazan alegres

Entre las líneas de los sentidos.

Quizás no sepa expresar

Esas pinceladas de colores

Que mi mente inventa,

Esos bellos paisajes

Que se esculpen en tus ojos

Entre sol y luna,

Quedando suspendidas en el viento

Las palabras en este atardecer

Cuando te habla de amor

En el más profundo silencio.


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jueves, 19 de noviembre de 2020

Que me salve el amor

 

Que me salve el amor

De esa vida no vivida

Que me salve de la oscuridad,

De esa flor seca que en mi anida

Sin brotar ese poema

Que duerme en mi interior.

Que me salve de esos fantasmas

Que me acechan en silencio,

De mis propios pensamientos

Que confunden mi mente

Sin saber de mis sueños.

Empujo mis manos

A escribir eternamente,

Que lleguen mis palabras

A derramarse en tus adentros.

Que me salven de mi mismo,

De lo que me hizo temeroso y débil,

Tus miradas que agitan

Inagotables emociones

En lid con la blanca luna

Cuando inunda con su luz la noche,

De ese llanto escondido

Mi corazón vulnerado

Escondiendo los nostálgicos instantes,

De ese espectro altanero

Que construye una tempestad

En el interior de mi pecho.

Que me salve de la apatía,

De esos mugrientos caminos

Donde se ocultan las sombras

Oscuras observando mis pasos,

De tus ausencias, de mis miedos,

De mis sueños frustrados,

De los recuerdos como llagas

Que de mi propia imperfección brotan.

Que me salve de esas mañanas

Vestidas de oscuridad,

De esos corazones cerrados 

Fríos, de las sombras 

De los malos sueños,

De los relojes que desconciertan

De la lágrimas derramadas 

De un niño hambriento.

Que me salve de esas almas

Encerradas en sus propias jaulas,

De mi propia locura

Que descalza y sin ruido

Se filtra en mis adentros,

De los tediosos y tristes días

Y de las tristezas de la vida.


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miércoles, 18 de noviembre de 2020

Cómo explicar

 

Finaliza el tedioso día,

Vuelve la nocturna oscuridad

Quedándose el frio fuera

Y se apodera de mi la nostalgia.

¿Cómo expresar el sentimiento

Que se guarda en silencio,

Cómo explicarte

Que cuando articular 

Palabras no puedo

Ni componer en mi boca

Esa frase que mi corazón dicta,

Y que se agrietan mis labios

Cuando se quedan mudos

Tras la sombra de la luna?

¿Cómo explicarte, confesarte

Sin verbos ni adjetivos

Lo que mis ojos expresan

Cada vez que te miro,

Si hasta en los días de lluvia

Luce el arcoiris cuando caminas?

No puedo explicar

Lo que me hace sentir tu roce

O el oír tu risa,

Ese instante de luz

Que danza entre mis palabras

Cuando te escribo,

Que dueña eres de los rayos 

Que por las mañanas entran

A través de mi ventana.

No se explicar

O mi pluma se queda inexpresiva,

Y que aún no siendo el hombre

Que en esta vida te merezca,

Aún asi no cerraría la cortina

Para que siguiera planteando 

Con tu esplendor mi vida.

Volver de nuevo a encontrarte

En la sutil noche de los tiempos

Luciendo la inmortal luna,

No se explicar, confesarte,

Ni tan siquiera escribir

Lo que mi alma siente

Y lo que mi corazón calla,

Cristal es el pensamiento

Frágil como un trozo de tiempo,

Que invocando los recuerdo

Ofrecidos en cáliz de los sueños,

Sueños que me acercan

Oyendo una plegaria

Entrañas del silencio,

Silencio sin tu gracia.

Se oyen la liturgia,

En el altar de tu pecho,

Amamantando mi juventud tardía

Resplandece tu sonrisa,

Cómo virgen impoluta

En un eclipse de sol y luna,

Viene a implantar su tiranía

La noche se desnuda

Colmando tu sublime ternura

En mis más sentidos versos,

Ofrendas en el altar de tus besos.

Desnudas mi alma y mi mente,

Velas que en mi pecho alumbran

Con un rosario de flores,

Y el humo ascendiendo al cielo

Llevando como en una plegaria

Que para ti escribo

Acompañada de la dulce 

Melodía de la noche.


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martes, 17 de noviembre de 2020

Cuando la magia

 

Cuando la magia

De tu sonrisa o de tus ojos

Me atrapan, nada

Desencanta mi vida,

Cuando la luna empieza

A alumbrar mis noches

Y el sol endulzan tus días,

Eres ese lugar donde

Cuando escapar quiero

Y el horizonte se desdibujan

En ti es donde me refugio

En esas noches de pesadillas.

Cuando en la magia

Siempre hay una melodía

Nacida de un sueño,

De lágrimas vacía

Sin odios, ni dolor,

Nacida del corazón

En un despertar al sol,

Es un estallido del universo

Una nova que explosiona

Bebiendo del resplandor,

Navegando al infinito.

Delirios de los besos

En la piel esparcidos

Allanando en el tiempo

En la cautividad del sentimiento,

Cuando en la magia

Suena una bella melodía

Me atrapa la luna,

Musa celestial

En el silencio de mis versos.

Amaneceres que germinan

Llenando mi alma

Fluyendo en mis rezos,

Melodías que iluminan

El inmenso universo,

Es esa magia en la noche

Esparciendo fulgores

En mis sábanas blancas,

Implora tus miradas

Cómo la esencia de las flores

Que atrae al colibrí 

Y su eterno aleteo.

La canción de mi silencio

Te dedico siempre mis horas 

Con esa eterna melodía,

Vibración, terremoto,

El temblor de mi alma

Cobra vida en el latir

En las gotas de lluvia

Que encierran la vida,

Y la grandeza de los poetas

Que siembran las letras

Para que germinen en tu boca

Cuando nace la magia

Floreciendo la fé y la esperanza.


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lunes, 16 de noviembre de 2020

Los gemidos del viento

 

En los gemidos del viento

Suena tu nombre,

Que recorre los senderos

De mi memoria,

Surcando valles

Atravesando montes,

Sintiendo el dolor

De todas las ausencias

Viento que recorre,

Prados y lagos,

Los misterios que esconden

Mi corazón y mi alma,

En todos sus rincones.

Justo es decir, ¡Créeme!

Que la eterna primavera

Para ti guardan

Los caminos del alba,

Se extinguirá el viento,

Se abrirán los cielos

Y llegará la dulce calma

Que se alza en la oscuridad

Mientras la noche estalla

En miles de estrellas

Elevándose en victoria

Abrazando el mar.

La rosa tú pecho

Entre tú senos,

Prisionera de mis sueños,

Me reconcilio con el viento

Que acaricia mi cara,

Cierro los ojos, 

Me abro a la vida

En este atardecer 

Que a escondidas me habla,

No esconderé mis sentimientos

Para que aniden en mi alma

Tu nombre, en mis entrañas,

En el murmullo de la brisa

Cuando atardece,

En ese río de luz

Cuando la luna

Se refleja en el mar,

Cómo una cascada de plata

Que se adentra sigilosa

En la inmensa profundidad.


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domingo, 15 de noviembre de 2020

Lluvia

 

En ese lugar donde las horas se detienen

Donde me sorprenden los suspiros,

Me oculto tras la ventana

Que la lluvia humedece sin cesar

Y entre las gotas de lluvia que caen

La noción del tiempo pierdo

En esta oscuridad que asoma.

Esos cimientos que soportan la loza

Frágil de mi propio mundo

Te nombro sin nombrarte,

Escondiendo tu nombre en mis abismos

Donde ávido lo pronuncio

Mientras muere el día

Y del mundo se adueña la noche.

Desvasta la lluvia la orilla,

Moja tu largo cabello,

Corre el río hacia el mar

Y el gemido del silencio

Se oye en mi conciencia que se agita

Entre el susurro y las lágrimas del cielo

Que llueve por tu ausencia.

Me sentaré al alba

Contemplando las gotas

Que caen por los cristales

Sin pronunciar palabras

De mis propios fantasmas cautivo

Entre el pasado y el presente.

El otoño nos muestra su capa de hojas,

Y yo aquí sigo sentado

Mientras se desliza mi pluma

En una escritura automática

Dejando que sienta lo que escribo,

Cuando surge escondida 

La luna tras las nubes,

Sus tímidos rayos se filtran

Entre las rendijas que se abren,

En las oscuras horas

Reflejándose en las gotas

Que se deslizan por los cristales

De la ventana de mi habitación

Que sin ti permanece a oscuras.


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sábado, 14 de noviembre de 2020

No importa

 

No importa 

Si la noche anda suelta

Navegando por esos cielos

En el insomnio cuando miro la luna

Que como musa guía mis manos,

Anda suelta mi inspiración

Hallándo en el tiempo

La magia de tu imagen

Que como la brisa recorre

Los latidos en mi pecho.

No soy poeta que escribe,

Eres tú quien se refleja

En todas mis letras,

O es el papel que absorbe

Cada sentimiento, escrito,

Esas voces calladas de la noche

Que rompen el silencio

Cuando te escribo.

No importa

Si requiero esos instantes

En el letargo de la oscuridad,

Esas pocas letras

Que componen tu nombre,

Ese lienzo en blanco

Que espera una mano

Sublime para ser pintado,

Requiero esos momentos

Que antes me fueron regalados.

Brillas en mi luna,

Ese reflejo plateado

Que se filtra en mis cansados ojos

Con tu sonrisa blanca y eterna

Que estremece mis cimientos,

Ternura en tus manos,

Risas en estas horas nocturnas

Que me trae el viento,

Pongo mi corazón y mi alma

En cada letra que forma mi poesía,

Cómo las notas claras

De una alegre melodía.

No importa el otoño

Aunque luzca el sol dorado

En el azul del cielo,

Y acabe llorando

Cómo lluvia en los campos,

No importa esa lluvia

Sin el poeta doliente,

O la cosecha verde,

Brotes de amor

De un corazón caliente.

No importan tus ojos

Sin poemas que broten

De un alma en libertad,

Seduciendo la noche,

En un beso largo y profundo

Junto a una hoguera

Crepitando con humildad.

No importa tu boca,

Sin labios que la besen,

Roja y jugosa fresa,

De sutil tacto

Cómo pétalos de rosa,

No importan tus manos

Piel de seda,

Que acaricia suave

La piedra en su camino

Hacia el mar, el agua.

Nada importa,

Si eres fruta prohibida

Nostalgia de un beso

Que arranca mi suspiro,

Deteniendo la primavera

Que llevo dentro.


SILVER ©

viernes, 13 de noviembre de 2020

La noche se hace poesia

 

La noche es poesía

Y cada verso que escribo,

Finalizando el día 

Lleva el sentimiento escrito,

En cada letra, en cada sílaba

Bailan las palabras

Como estrellas en el firmamento.

Magia en los luceros,

En el perfume de tu pelo,

Se alza mi corazón

Que se transforma en jilguero,

Que a la luna canta 

Cómo en las notas de una flauta

De mis te quieros,

Voz oculta en mis adentros

Inundando mis pensamientos.

¡Oler tu perfume mujer!

De azahar sin requiebros.

Nota dulce, lo huelo...!

Poeta de noche,

De día con tu recuerdo,

Memoria que por ti suspira,

Estelas de instantes anhelados,

Memoria nuestra,

De besos guardados.

La noche se hace poesía,

Que se compone de sueños

En la emoción de un encuentro

Escondido tras la luna

En el escondido silencio.

Aún si hay distancia, no es lejos,

Y como el viento vuela

Oculto en la realidad,

Apasionado llega en lo más profundo

Hablando de amor, de la vida

A través de unos oscuros ojos

Tan profundos como el universo.

La noche se hace poesía,

Mística, mágica con tus besos,

En ese espacio que llenas

Tan solo con tu presencia,

Y la oscuridad se hace bella

A pesar de las nubes negras

Que cubren el cielo,

Trémula la noche, la poesía

Se va escribiendo a cada estrofa,

A cada verso, a cada beso

Que resplandecen a medida

Que mi pluma se desliza

Entre las blancas páginas

Que recibe su tinta

Cómo ofrenda al poema,

Cuando la noche se hace poesía

Mi mano toma vida.


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jueves, 12 de noviembre de 2020

Con voz del blues

 

Pones tu nombre al sentimiento

Alas que en la sangre 

Persevera inevitablemente, 

Encuentra el camino 

Hacia tus doradas orillas

Mi corazón latente

En noches de blues,

Embrujado, llenándome

De tu música y tus risas.

A la luz de una vela mortecina,

Que cuenta al mundo

Anidando en el horizonte,

Llenando mi copa

De tu alma en silencio

Con aromas de rosas,

Me acaricia la garganta

El líquido, en un viaje largo

A mi pecho, que embriaga

Despertando mis sentidos.

Cierro los ojos,

Me envuelve la música,

Toca mi cuerpo,

Escucho los lamentos rítmicos

De una voz ronca y profunda

Contemplando tu serena luz,

Tu espíritu, tu esencia,

Siendo el espejo de tu mirada,

Esta noche siento de nuevo 

El ritmo del blues.

Pones tu nombre

Al sentimiento contenido

En esas ausencias cuando el sol

Se va ocultando en la lejanía,

Cuando en el silencio 

Me embriaga con el perfume

De tu cuerpo en la quietud

Tardía cuando anochece,

Y quieto quedo ante tus ojos

Cuando en ellos se refleja la luna

Suena en una guitarra

Con la ronca voz del blues

Esa luna, hoy ausente

En su regreso planteará

El oscuro del cielo

Para que le pongas tu nombre.

El viento no es sólo aire,

Es el mensajero que me trae

El recuerdo entre las calles

Expresando entre murmullos

Tu nombre en sus rincones,

Brisa que refresca la noche,

Cómo una vieja canción de blues

Con la letra estos íntimos

Versos que huelen a te quieros,

Aferrándose súbitamente

Al resplandor cuando

Va naciendo el día.


SILVER ©


miércoles, 11 de noviembre de 2020

¿En qué silencio?

 

¿En qué silencio 

Guárdaste mi recuerdo

Que frena el momento

Suspendido en el cielo,

Tus palabras hablaron

Trazando la senda

De unas nubes de seda?

¿En qué silencio

Está la poesía que escribo

Desde lo más profundo de mi alma,

Donde se esconde los sentimientos,

Y pensandote me pregunto,

Cómo son tus manos

Pintando la luna llena?

¿En qué silencio guárdaste

El color de tus mejillas

Brillantes y sonrosadas,

La melodía de tu voz cantarina,

La risa en que tus labios

Enciende mi fuego?

¿Donde están tus silencios

Que esconden tu pelo,

Soltado al viento,

Cómo cometa en el firmamento?

Dame tus silencios,

Tus confidencias reprimidas,

Que esta alma quieta y paciente

Las esperan, como gotas de lluvia

En tierra seca, en mis madrugadas.

Dame tus silencio

Cuando se visten las calles

Del atardecer y el sol declinando

Alarga las sombras

De ese ocaso solo contemplado

Por unas almas sensibles e inquietas.

Dame tus silencios

Guardados en tu garganta

Cuando su eco resuena

En tu cálido pecho,

Donde se acumulan las horas

Sufridas en toda una vida.

Dame tus silencios

Sin olvidar los sueños,

Sin esconder los recuerdos,

Las viejas historias, los miedos,

Aunque ya no existan las palabras,

La poesía, mis sentidos versos.

Dame tus silencios

Esos sueños rotos

Casi olvidados en un cajón

Prisioneros, esperando ese brote

Cómo de una semilla,

Cómo de una crisálida

Que impaciente recobra la vida.


SILVER ©


martes, 10 de noviembre de 2020

Hay noches

 

Hay noches que son interminables

Con recuerdos rebeldes,

Noches en blanco,

Noche que de ausencias se llena

Desapareciendo la luna

Que tras las nubes se esconde

Abrazando tu presencia

Detrás del verde monte.

Hay noches que son música

Buscando en el llanto,

Noches que nos alejan,

Donde se hacen patente

Y se convierten en tristezas,

Ese amor escondido

En el corazón guardado

En la profundidad, latente...

Noches en qué todo cambia,

Y nada se queda,

Noches en que el amor

Hacia ti camina,

Noches que sin repuestas llegan,

Que deshoja el alma

Guardada en el sótano

Siempre a la espera

Olvidando las quimeras,

Con los sueños intactos

Que afloran con la luna nueva.

Hay noches mágicas

Que alimentan los sueños

De luces brillantes

Que la luna adornan

Cómo multicolor corona,

Guardando los silencios

En la fragilidad de las horas

Que nos concede el tiempo

Parado ante tus ojos.

Noches que me seducen

En el borde del mar,

Brisa que empuja mis palabras

Derramando sentimientos

Al filo de ese reloj parado

Que desnuda los minutos

A la espera del encuentro,

Clavando las miradas

Deseando los besos,

Siendo de tu luz preso

Borrando las líneas

Que me separa de la luna.


SILVER ©


lunes, 9 de noviembre de 2020

Dos amantes

 

Oigo el canto del viento 

Que se cuela suavemente 

Entre las desiertas calles,

Momento frágil del encuentro

De los furtivos amantes

Cuando todos duermen,

A imaginar no alcanzo

Cómo inundan de amor

Sus rostros cuando 

Se cruzan sus miradas

Que se funden con la oscuridad

En el éxtasis del encuentro.

Se funden los recuerdos

Entre el cielo y suelo

Escondidos bajo el manto

De la eterna memoria 

De las caricias y los besos,

Y debajo del cielo lágrimas

Mientras la noche estalla,

Se alza la oscuridad

Alzandose en Victoria 

Abrazando las sombras.

Y aquí un jardín, sin rejas,

Donde pueden dormir

Mirando las estrellas 

Oliendo a eterna primavera,

El verde es el color

De la dulce esperanza,

Por donde se esparce

Entre las flores el amor,

Embriagador perfume

Expresado en miradas y caricias,

Dos amantes, una vida,

Que en silencio se confiesan

Cuando cae el día

Sin más palabras que el sentimiento,

Cuando habla las puntas de los dedos

Acariciando la piel erizada

Limitando el infinito

En un estrecho abrazo,

El techo es el firmamento,

Su lecho de perfumadas flores,

Pétalos de rosas cubren

Sus desnudos cuerpos,

Y sin más fuerzas

Dormidos se quedan

Esperando el alba.


SILVER ©


domingo, 8 de noviembre de 2020

Hoy dos

 

Si algún día dejo de escribir

Mis letras al acabar el atardecer,

Palabras que hacen

Que te sientas de mi cerca,

No es que yo no quiera,

Son mis manos que quedaron mudas.

Si mis labios dejan

De pronunciar tu nombre,

Y el tacto de mi mirada

No te acaricien con mis ojos,

Si mis labios queden sellados

O llegue tarde a tu cita,

No es que yo no quiera,

Es el silencio agrio

Que se apoderó de mí vida.

Si yo ya no caminara

Contemplando en lo alto la luna,

Ni persiguiera tu nombre

Por todas las esquinas,

Sí mi nombre quedará

En ese último olvido,

No es que yo no quiera,

Atrás dejé mi memoria.

No dejaré de escribir

Mientras mis manos puedan

Con la inspiración de la luna

Siempre blanca y nueva,

Mientras tu pelo ondee al viento

Para deleite de mi alma,

Yo, para ti seguiré escribiendo

Mientras respire tu perfume

Entre mis deshechas sábanas,

Y el aroma de tu cuerpo

En mi corazón perdure,

Mientras yo respire,

Mis ojos te miren,

Mis manos para ti

Siga escribiendo cada día.


No es casualidad

Que tu nombre en forma 

Las notas de una melodía,

Que cantan a lo lejos

Al universo en su inmensidad,

Inventado por el caos

Y lo digo a fé mía,

Para dar sentido,

A la negrura celestial.

Arde el fuego de tus pupilas,

Fuego primigenio,

Con el mismo color de la vida,

Vigilando como crece la luna.

Con sus rayos primeros,

Del cerezo crean sus flores,

Curando mi melancolía

En sus momentos peores.

Tocas las rocas, nacen las rosas,

Acompañada de una melodía,

Emergen las estrellas,

Los luceros, las cometas,

Los deseos que se piden 

En cada una de ellas.

Se eternaliza el plenilunio,

Plateando el manantial,

Que fluye cristalino,

Que fluye hacia el mar,

Creaste el alba,

Y surgió el deseo,

Nacieron los poetas,

Las sirenas y su cantar.

Con tus pies descalzos,

Creaste la hierba, el trigo,

La lluvia, el viento,

Creaste el milagro,

Que en mi va creciendo

Mientras mis palabras

Se plasman a cada atardecer 

Esperando a la luna.


SILVER ©


sábado, 7 de noviembre de 2020

Si yo pudiera

 

Si yo pudiera coger en mis manos

Esas lágrimas que tú corazón han llorado,

En cada una de ellas

Si yo pudiera, escribiría una poesía

Que soporte los cimientos del mundo

Y crecieran a tu espaldas unas alas,

Vuela que acortas distancias

En cada aleteo de tus plumas blancas

Cómo ángel de mis pensamientos

Abriendo mis brazos

En esta tarde que cae

De dulces presagios la llenas.

Cautivos mis más íntimos sentidos,

Deseando besar tus ojos

Convertir tus lágrimas en almíbar

Donde beba el colibrí de la mañana

Cómo en las flores

De un inmenso prado,

Paras tu aleteo en el borde de mar

Derramando tus lágrimas

Entre el murmullo de las olas

Entre el sonido de la brisa,

En la arena de una solitaria playa

Enredando tus cabellos

Con manos de nácar en una plegaria.

Seguiré escribiendo

En esas lágrimas como perlas

Que de tus párpados emanan,

Para mí inalcanzables

Que me atrapan cómo mar bravío

En el silencio del crepúsculo

Que roban mis miradas.

Callan las aves, llegó el silencio,

Lágrimas de agua bendita

Que en la oscuridad de la noche

Brillan como luceros,

Si yo pudiera escribir en tus lágrimas

Lo que tú corazón han llorado,

Y en cada letra escrita

Siempre habrá algo de mi

Pero sobre todo de ti hablan.


SILVER 

viernes, 6 de noviembre de 2020

Camino de flores

 

Caminos de flores

Que acortan las distancias,

Alta la mirada

Escuchando el silencio

Donde está sin tiempo

En la noche te escribo,

Te escribo desde la vida

A ti escribo en estos versos

Asomándose la luna

Entre los manantiales,

La brisa mece el naranjo

Entregándote la fragancia guardada,

Azahar y canela,

Canela y azahar,

Repartiendo generosa

El perfume que de ti me habla.

Dame tu luna y tú viento,

Tú sol, tus lágrimas,

Eres de carne, sangre,

Corazón y alma,

Trenzados de hilo invisible

Son los anhelos de las vidas pasadas,

Ver nuevos mundos

A través de tus miradas

Embelleciendolos con tus palabras,

Camina descalza

Por ese camino de flores,

El mundo se abre a tus pies,

El rocío los bañas

Al despertar en la mañana.


SILVER©

Por y para ti!!

Esperanza

 

Ese incesante oleaje del mar

Que va meciendo mi esperanza

Bajo un dosel de estrellas

Que tintinean temblorosas

Mientras en la noche 

Sueñan las sirenas.

La luna risueña en las alturas

Trayendo el sonido de tu risa

Entre la paz y el silencio

Pétalos de mi fantasía

Que fluye trémula 

Floreciendo en la alborada.

En ese mar que da vida

Donde vivimos atardeceres

Cuando poco a poco

Se iba colgando la noche,

En esos contraluz tu figura

Cómo lucero que luce en el cielo,

En la oscuridad que va naciendo

Cómo diosa del agua

En ese fulgor tu emerges.

Quise deshojar una estrella

Entre luces y sombras,

En ese me quiere, no me quiere,

Cómo a una margarita

Que jamás sus pétalos pierde,

Mientras la paleta del alba

Colorea de nuevo el cielo,

Ese misterio de la vida

Que efímera y transparente

Ondea entre tu caminar

Por esas largas avenidas del tiempo.

Se va escondiendo la luna,

Se apagan los luceros,

Mientras el sol se renueva

Desde el reino oscuro

De los abismos del océano,

Sereno y callado va amaneciendo

Entre el despertar de lo eterno,

En ese silencio en que la noche

Gime callada la conciencia

Y el alma entre suspiros,

Susurros y risas eleva

Al firmamento una plegaria

Para colmar tus sueños.

Imagino ese mar lleno de luz

Dando claridad a esos rincones

Vacíos la luna llena,

Plateando los corales

Escuchando el fragor de las olas

De dónde brota una melodía,

Una dulce canción de cuna

Susurrante entre el viento

Colmando los suspiros de tu pecho,

Templo donde se guardan

Tus más tiernos sueños.


SILVER ©


jueves, 5 de noviembre de 2020

Locura

 

Quizás tenga algo de loco

Para refugiarme

En mis locas letras,

Ese cobijo que busco,

Donde solo se escapan mis sueños,

Donde guardo el luto

Por el fallecimiento de mi cordura,

Y desde esa clausura,

Cómo monje con voto de silencio,

Cada atardecer te escribo

Pidiendo que me acompañes

En mi propio delirio.

Buscando cada día la luna,

Quizás algo de paz

Que atenúe mi locura

Y tan solo la hayo

Cuando tus ojos me miran,

El tiempo deposita en un beso

A contraluz, como en una fotografía

Entre el fundido del blanco y negro

La eternidad de ese momento,

De un fugaz encuentro

Postergando el olvido.

Que no quepa duda

Que las palabras que escribo

Se las robé al viento

Que durante el día

Me trae tu recuerdo,

Y por las noches contemplo la luna

Que eres tú en mis sueños

Velandome mientras duermo,

A veces busco las palabras

Sin encontrar las precisas

Para describir lo que siento

O que definan detalladas

Lo que tus ojos me inspiran

Desafiando los elementos.

Quizás tenga algo de loco,

Será que me causa ese delirio

Cuando perdido me siento,

Y lleno las noches de suspiros

Cuando por mí ventana

Cada noche luna te contemplo.

El valle donde la noche

Se sumerge entre los arboles

En el preludio de las madrugadas,

Nace un canto silencioso

Cuando la palabra vuela,

Y la sílaba dormida

Se transforma en mariposa

Dejando la crisálida como tintero

Donde sumerjo mi pluma.

En mi nace el alba

Pisando las sombras,

Se desdibujan las horas

Que preceden al nuevo día,

El horizonte se aclara

Y los quiromantes elaboran

A la luz de las velas sus pócimas

Para mí locura sin cura.


SILVER ©


miércoles, 4 de noviembre de 2020

Preguntas

 

¿Quién pregunta por una mirada

Misteriosa y profunda,

Por el alba que luce en tu frente,

Por la tempestad de tus besos

Y el silencio insinuante de tu sonrisa?

Yo pregunto por

El mar que abre sus aguas

A la sirena con su canto

Descansando sobre las rocas

Y entre las traviesas olas

Hechiza a su marinero amado.

Yo pregunto por ese amor

Que perturba la tranquilidad,

Llenando los rincones vacíos

De toda una eternidad,

Por las caricias no dadas

Que en el alba moría,

Los sueños olvidados

Por las palabras

Que mis versos dibujan.

Si me van a preguntar,

Pregúntame por mis te quieros,

Escondidos tras la cortina

Del abismo de mis silencios.

Pregúntame por su nombre,

Que como pájaro

Canta a mis recuerdos,

Pregúntame por su presencia,

Que borra las crueles cicatrices

Que acalla los rumores del viento.

Yo pregunto cuando 

En la madrugada naciente

Van caminando tus sueños,

Pies descalzos, cómo ángel

Que luce sus blancas alas,

Extendiéndolas en ese lugar

Llamado tiempo

Para emprender el vuelo,

Quietas esperan las preguntas 

Mientras en el atardecer escribo

Haciéndose interminables

Cuando entre letras suspiro,

Breve es el sueño

Cuando despiertas de tu vuelo

Náufrago del silencio.


SILVER ©

martes, 3 de noviembre de 2020

Dulce luna

 

Dulce luna, 

Tan lejos y tan cerca,

Te contemplo en mis pensamientos

Aún de día yo te siento,

En esas noches en vela

Eres mis sustento,

Dulce luna, tan cerca 

Y a la vez tan lejos.

El viento sopla,

Baja de las frías montañas,

La lluvia cae sobre el tejado,

Se amontonan las hojas,

En un rincón vacío

De la plazoleta de mi barrio.

Las gotas, al caer forman círculos,

En la fuente y el viento

Riza el agua

Con su sonido monótono

Del letargo de la tarde me arranca.

Dulce luna, tan cerca

Y a la vez tan lejos,

La lluvia al cristal azota

Martilleando la ventana,

Aún sin verte, te veo

Caminando por la calle empedrada

Con tu rápido taconeo

Bajo un multicolor paraguas,

Dando brillo a este día gris

Con tu aliento.

Dulce luna, tan cerca

Y a la vez tan lejos,

Y aquí estoy,

Esperando en soledad

Que pronto llegue la noche,

A que ilumine a cada parpadeo

De tus ojos la oscuridad

Que ensombrece el cielo,

Puntos de luz

Que se confunden con los luceros,

Esos que cada mañana

Alumbran el alba.


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lunes, 2 de noviembre de 2020

Sin ser caballero

 

Mis sábanas tienen un secreto

Que solo las noches conocen,

Se esconden tras el silencio

De tu mirar que desde arriba

Es causa de mi desvelo,

Huye como nube

Empujada por el viento,

Escapa presurosa al alba

Sin esperar al sol

Que en el horizonte asoma.

Nunca dejaré de ser caballero

Si mis versos que cada atardecer

Salen de mi pecho,

Nunca dejaste de ser mi dama

Y aún sin armadura

Batiré mi lanza en las justas

Con el pañuelo que lucías 

En tu esbelto cuello

Amarrado en su punta,

Y en el campo del honor

Me batiré en un eterno duelo,

Defendiendo tu figura

Blandiré mi espada

Contra dragones de fuego.

Aún sin ser caballero

Me sale del corazón

Escribirte cada atardecer versos,

Robarle al tiempo esos instantes

Para escribirte, sentirte

Aunque sean pocos momentos,

En estas letras van mis suspiros

Con las alas de un cisne negro,

Que inspirándome en mi delirio

Se dirigen a ti doncella de la noche,

Musa que bajo del Olimpo

Que causa mis desvelos,

No dejaré de ser caballero,

Si aún cómo Quijote

En mi propia locura

Mi alma la tuya busca.


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domingo, 1 de noviembre de 2020

Para ti

 

Para ti, en mi corazón no hay espacio para olvidarte, aún sin besos ni abrazos, donde yo siento tu amor no expresado, para ti mi dulce dama del norte.


Por esas calles camino,

Por el rudo empedrado

De éste pueblo mío,

Andando errante

Poniendo a prueba mi fortaleza,

Disipando mis pensamientos

Perdiendo la conciencia,

Y a recobrarla, 

Tendida tu mano en silencio.

Siendo de nuevo el dueño

De mis sentimientos,

Timonel de mi alma

Poniendo mi empeño

A experiencias nuevas,

Arrebatando de mis entrañas

De ese veneno que me quema,

El de tu ausencia,

Sigo con paso lento

Durante el crepúsculo,

Cada farola,

Punto de luz que me indica

El camino a seguir,

Y como una aparición,

Mi nombre oí

Cómo en un eco,

Y tu figura plateada por la luna

Apareció entre la bruma,

Rodeando mis hombros

Con tus brazos,

Juntos volvíamos

A seguir el camino

De rudo empedrado.


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Se desgrana el tiempo

 

Quisiera borrar el pasado

Cómo el hacha afilada 

Corta la dura madera,

Quedando atrás los recuerdos

Que los ecos de mi mente se acallen,

Escapándose el día en silencio.

Esas dos hermosas sílabas

Forjadas por las hadas

Que cada noche velan tus sueños

Cuando se desgrana el tiempo,

Este oscuro y caluroso otoño

Deja atrás la luz del verano,

Esas playas quedan lejanas,

Va trepando por mis venas

Calentándo mi corazón 

Con el pronto y dulce aliento.

Pero me basta con mirarte,

Se enciende de nuevo 

Como roja hoguera

Convirtiendo todos mis enojos

En eterna primavera,

El viento frío se filtrará

Entre las calles oscuras,

Se marchitan las hojas

Que de los árboles caen 

En esta callada noche,

No se oyen los silencios

Ni el respirar de mi pecho.

Nadie oye mi protesta silenciosa,

Ni el llanto de los olivos

Que se van desgranando,

Ni el eco demoledor

De los gritos de la tierra,

Cuando inexorable el invierno

A paso firme se va acercando,

Bajo la luna que te ilumina

Desafías con tu caminar,

Desconcertado los días

Mientras a oscuras la contemplas

Por esas calles iluminadas

Que con tu presencia el brillo toma

De tu mirada infinita.

Una esquina desierta,

A contra luz de una farola,

Imagen mortecina,

De una noche que se escapa,

Donde se recogen dos seres,

Después de risas y deseos

Y eternas miradas.

¿Que esconden los corazones?

¿Secretos guardados 

Voces desesperadas,

O gritos de desgarro?

Se abandonan a la aventura

Llamando a las puertas del amor,

De bella esperanza,

Bajo la noche de terciopelo,

Que se levantó temprana

Bajo esta noche se aman.


SILVER©