Allí donde el horizonte
Se confunde con el mar,
Mira hacia lo alto
Por encima de las olas
Mecidas por el viento,
Donde el cielo azul
Se llena de estrellas,
Allí mismo, yo te espero.
Donde el aire canta
A las hadas entre los colores
De mil un corales de entre las olas
Se van despertando
Poco a poco, estirando
Sus diminutos brazos al cielo,
Coloreando el marino paisaje,
No con óleos, con los poemas
Que para ti escriben los poetas.
En esa paleta multicolor
Del fondo del mar
Y el encanto de sus melodías
Traspasan las profundidades
Para que tú tumbada en la arena
Las oigas mientras suenan,
Cada latido de tu corazón
Resuena en la noche
Entre sonrisas y caricias,
Te miro y te admiro como joya
Cuando el alba nos sorprende
Y con sus primeras luces
Contornean tu ondulante cuerpo.
En la noche que de mi se apiada,
Me devuelve la luna
Reflejándose en el mar,
Esencia de tu ser, de tus ojos,
En esa perfecta irrecionalidad
Que va uniendo cielo con mar,
Silenciosa se escapa la noche
En esa línea de luz
Que asoma por el horizonte
Dando origen de nuevo a la vida,
El mar en calma, las hadas se callan,
Y para ti solo tengo mis manos
Mi pluma y mis sueños,
Y allí, en esa clara línea
En el mismo amanecer
De todos los tiempos
Se tejen los anhelos.
En la caída lenta
De la noche antes del alba
Y aunque la luna se oculte
Tras las nubes blancas,
Si el ruido de la oscuridad
Cuyo silencio tan solo roto
Por ese viejo reloj de pared
Con el tic tac del balanceo
De su dorado péndulo
Y el movimiento de sus saetas
Marcando dulcemente las horas,
Yo te espero...
SILVER©
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