miércoles, 12 de agosto de 2020

En ausencia de los atardeceres


En la ausencia de los atardeceres
Que colorean las nubes,
Es mi pluma quien pinta
De rosa mis íntimos versos
Aliviando el corazón que estalla
Cómo una super Nova
En lo profundo del espacio,
Se expande desde mis entrañas
Cómo el mar sobre las rocas,
Atardeceres que caminan
Entre el parpadeo de tus ojos
Y el aroma del espliego
Que se filtra entre las ramas
De los verdes olivos
De los campos de mi Andalucía.
Atardeceres donde encuentro
Los versos nacidos en el regazo
De unos bellos ojos
Cuya amable mirada
Se proyecta en el crepúsculo
Arrojando el sonido de una guitarra,
Estallando entre las nubes
Cuando a media voz
En la oscuridad los recitas
Haciendo de tu corazón
El altar del templo de tu alma,
Iluminado por por miles de velas
Cómo estrellas del firmamento.
Atardeceres donde van los sueños
Que sobrevuelan las flores
Humedecidas por las gotas
De una cercana fuente
Que cristalinas se esparcen
Cómo el perfume de las rosas,
Mi prosa se plasma
En sus pétalos que exaltan
Sus colores a cada gota.
Atardeceres que el viento plácido
Con olor a mar me trae
El recuerdo de tu figura
Y como mantra en oración
Vuelve a mí cuando el sol
En un suspiro irremediablemente
Se va hundiendo
En los abismos del océano.
¿Que diría Selene?
La oscura y cálida noche
Asoma mientras se eleva
La creciente y tímida luna,
Invitando a soñar
Regalando a la brisa los suspiros
Que de tu pecho escapan,
En esos silencios rotos
Entre la noche y el día
Enmudeciendo el mirlo
Antes de rendir tributo
A la reina de la oscuridad,
Y con su canto alegre
Le da la bienvenida
Poniendo música a lo que escribo
A cada atardecer
Cuando la tinta de mi pluma
Alegre cobra vida.

SILVER ©

No hay comentarios:

Publicar un comentario